Esta joven holandesa rubia aprovecha su paso por la discoteca para usar los lavabos. A ella no sólo le urge ir a orinar, sino que ella tiene otra urgencia que saciar.
Su coñito está ardiendo y tiene que masturbarse porque si no, va a explotar. La holandesita se encierra así en el servicio, se asegura de que no hay ninguna cámara de seguridad funcionando y comienza a masturbarse disimuladamente mientras hace pis. Para ayudar a esta ardua tarea, la bonita chica está pensando en el uso que se le podría dar a esos dos agujeros que hay en el servicio. Después de algunos minutos de masturbación y de comprobar que no puede salir (¿es esto un sueño?), la jovencita se percata de que por uno de los agujeros aparece una polla, los agujeros son gloryholes para aquellos que no lo conozcan, y del otro también sale otra polla que es lo único que le hacía falta, metiéndoselas en la boca y chupándolas bien a gusto.
wowww ke tia me la follaria en cualkier momento